Calle Obispo No. 153 esq. a Mercaderes. Habana,
La Habana, Cuba
(+53) 78609529
si
Acerca de
Ambos Mundos
Mucho se ha hablado de la predilección de Ernest Hemingway por hospedarse en el hotel Ambos Mundos. Allí, en la habitación 551, que se mantiene igual que en ese entonces, escribió los primeros capítulos de su novela “Por quién doblan las campanas”.
Las habitaciones son confortables y esto también se aplica al área del bar del vestíbulo de la planta baja, con sus acogedores sofás modernos y blandos. La terraza de la azotea tiene vistas maravillosas de la Plaza de Armas y de los alrededores; pero la ventaja principal de permanecer en el Ambos Mundos es la proximidad a los mejores y más atractivos lugares de la Habana Vieja.
Los clientes pueden ver cierta filantropía en el hecho de que el hotel es operado por la oficina del historiador de la ciudad de La Habana a través de su compañía llamada Habaguanex. Todos sus beneficios están reinvertidos en la restauración del centro histórico de la ciudad.
O 'Relly No.4, (Plaza de Armas), Habana Vieja, La Habana
Palacio Segundo Cabo
El Palacio del Segundo Cabo se encuentra en el lado norte de la Plaza de Armas, La Habana Vieja. Este majestuoso palacio es de estilo neoclásico y fue construido en 1772 con piedra caliza local llena de agujeros e incrustaciones marinas calcáreas. Este edificio se construyó primero como sede del vicegobernador español. Actualmente, y luego de varias remodelaciones durante las cuales funcionó como Correos, Palacio del Senado, Corte Suprema, Academia Nacional de Artes y Letras, o la Academia de Ciencias de Cuba, actualmente pertenece al Ministerio de Cultura de Cuba y alberga el Centro para la Interpretación de las Relaciones Cuba-Europa.
Calle San Ignacio 54 (Plaza de la Catedral), Habana Vieja, La Habana
Restaurante El Patio (Palacio del Marqués de Aguas Claras)
Es un palacio barroco de 1760 venerado por la gran belleza de su patio andaluz. Tiene una fuente rodeada de vegetación tropical donde encontrará varias. Antes de la Revolución, este edificio monumental era la sede del Banco Industrial; hoy en día alberga el Restaurante El Patio. A pesar de que ofrece comida tradicional cubana, su especialidad es la carne y el crustáceo, platos como la Parrilla Mixta de la Catedral (una parrilla variada) y brochetas de langostas y gambas. El bar sirve una colección de vinos, cervezas, rones y cócteles. Actualmente es posible comprar suvenires en la tienda de artesanía ubicada en la antigua Casa de Baños, en el lado oeste de la plaza de la Catedral.
Calle Mercaderes No. 114, Habana Vieja, La Habana
Museo Maqueta de la Habana Vieja
El Museo Maqueta de La Habana Vieja alberga una maqueta a escala 1: 500 de La Habana Vieja, uno de los modelos más importantes de toda Cuba, y está considerado como un lugar de gran interés, conocimiento y entretenimiento por parte de sus habitantes. Se actualiza continuamente y es bastante impresionante debido al detalle increíble en lo que respecta a algunos de los edificios más importantes de la Habana Vieja. Este es uno de los museos imprescindibles de la Habana Vieja, ya que le permite imaginarse cómo es el centro histórico de La Habana en su conjunto y, por lo tanto, poder verlo mejor al caminar por sus calles.
Carretera de La Cabana, Habana del Este
Fortaleza de San Carlos de La Cabaña
La gran Fortaleza de San Carlos de la Cabaña, conocida como 'La Cabaña', que corre junto al puerto, fue construida después de la captura de La Habana por los ingleses en 1763. La mayor de las estructuras militares construidas por España en América, esta fortaleza fue completada en 1774 y su presencia formó un elemento de disuasión completo y efectivo contra los enemigos del país. El polígono, que ocupa un área de alrededor de 10 hectáreas, consta de bastiones, revellines, fosos, pasillos cubiertos, cuarteles, plazas y tiendas. Está impresionantemente bien conservado, y los jardines y las murallas se iluminan románticamente por la noche. Esta fortaleza alberga la espectacular ceremonia nocturna de El Cañonazo de las Nueve, el disparo de un cañón que marcó el cierre de las puertas de la ciudad, una de las tradiciones más antiguas y atractivas de La Habana.